La familia es el núcleo que influye de forma más poderosa sobre lo que son y lo que serán cada uno de sus miembros, los cuales interactúan y se influyen recíprocamente a lo largo de su vida en común.
Así, el entorno familiar condiciona el equilibrio personal, los conocimientos, las habilidades, los valores, los comportamientos, la manera de relacionarse dentro y fuera de las familias… y en definitiva el grado de satisfacción personal ante la vida.
La «Guía para afrontar los problemas más frecuentes de las familias» pretende favorecer la información, la formación y determinados procesos de reflexión que facilite la adaptación y el desarrollo de habilidades ante los cambios que se producen en todos y cada uno de los miembros de las familias, a lo largo de su dinámica evolutiva.